Desde Oaxaca...
La casa está ubicada en la periferia de la ciudad de Oaxaca de Juárez, contexto en desarrollo, en pleno cambio de uso de suelo, donde apenas poco más de la mitad son construcciones; una combinación entre casas y grandes bodegas.
El encargo se da con algunas peticiones muy claras, debido a las condiciones del actual entorno se enfatiza que la casa aparente no estar terminada al exterior, que se genere la oportunidad de tener un espacio de recreación al aire libre en el interior, a través del uso de la mitad del terreno como jardín.
El predio tiene veinte metros de frente y diez de fondo, el programa se desarrolla en una cuarta parte del total posible, en un área de cinco por diez. A partir del requerimiento específico de la apariencia esperada, de referentes inmediatos del contexto y de una filosofía personal de diseño, donde la tectónica es parte esencial, se escoge el material; block hueco de concreto, mismo, que por sus características, condiciona el diseño de los espacios a módulos marcados por el sistema constructivo, y al mismo tiempo, permite el manejo de los vacíos en las proporciones necesarias y específicas para ventilar e iluminar cada uno de ellos.
Las aberturas que funcionan como ventanas en el primer y segundo nivel están posicionadas en consecuencia de las vistas no deseadas de los vecinos; en la planta baja sucede algo diferente, donde se busca generar la mayor conexión posible con el área de jardín a través de aberturas de mayor proporción y número.
El funcionamiento de la casa Guadalupe se desarrolla a través de dos ejes principales, uno horizontal y otro vertical, el primero más público y el segundo mucho más privado; en el primero de ellos es una sucesión de espacios con usos diferenciados, jardín, espacios comunes y de servicios, relacionados a actividades sociales, de producción y de recreación.
El segundo eje corresponde al desarrollo de las actividades personales y de descanso, que hacen uso de los espacios más íntimos, conectados y aislados al mismo tiempo de manera vertical.
El proyecto es una búsqueda de intimidad espacial, es un ejercicio volumétrico básico, se dibuja finalmente como un solo elemento, se piensa con la intención de generar la sensación de ser una roca, un monolito habitable; sensación que se produce por la naturaleza y proporciones del material, imponente y rudo, que construye el espacio a través de una escala propia, totalmente sensorial y tectónica, que refuerza la atmósfera del contexto en constante desarrollo.
Nombre de proyecto: Casa Guadalupe
Arquitectos: Omar López Bautista | ET.co
Cálculo estructural: Miguel Ángel Torres
Diseño de iluminación: Samantha Betancourt
Superficie: 161 m2
Ubicación: Oaxaca de Juárez, México
Fecha: 2018
Fotografía: Omar López Bautista, Emanuel Torres