Arquitectura

Casa Cubo, Arq. Waldo Alborta / Arq. Isabel Abularach

Arq. Waldo Alborta – Arq. Marisabel Abularach

Esta pequeña residencia, ubicada en el sector norte de la ciudad, recoge una de las inquietudes permanentes de la arquitectura residencial, que a lo largo de la historia ha sido muchas veces ensayada: el cubo.

Entre los referentes más inmediatos de este tipo de proyectos se encuentran dos ejemplos de Adolf Loos, un proyecto no construido de Le Corbusier, la casa Schroder de Rietveld y una vasta experiencia desarrollada en la Cooper Union bajo la dirección de John Ejduc y otros.

Sin embargo, aunque los referentes son parte fundamental en la constante reconstrucción de los tipos arquitectónicos, las motivaciones que nos llevaron a desarrollar este proyecto provienen de diversos lugares.

Una serie de indagaciones sobre los procesos compositivos del Neoplasticismo, en particular la obra de Theo van Doesburg, nos ayudaron a definir la implantación del proyecto: Un volumen de 7 x 7 m, rotado dentro de un terreno de 21 x 21 m, que establece una grilla compositiva dentro la cual se definen los distintos tipos de áreas exteriores.

Se trataba de establecer una sutil relación con el entorno y resaltar la presencia de la casa dentro de un contexto dominado por edificaciones de mayor tamaño, controlar la transferencia térmica revistiendo el volumen en piedra y evitar los grandes planos vidriados proponiendo, en cambio, vanos pequeños para obtener focos visuales específicos.

El comitente solicitó un programa sencillo –adecuado para un máximo de dos personas– que requería fluidez en el espacio interior, y el máximo aprovechamiento de las áreas exteriores.

Interiormente, la casa está compuesta por un solo espacio, evitando la llegada de los muros a la cubierta, permitiendo la percepción total del volumen. En la planta baja se ha integrado el área social a la explanada de la piscina por medio de una galería cubierta que está incluida dentro del cuerpo volumétrico.

La casa se planteó desde su inicio como un cubo perfecto, cuya perspectiva la exalta a una monumentalidad no esperada para un proyecto de tan pequeña dimensión.

Edificio COBEE, Arq. Rolando Aparicio O.

Edificio COBEE, Arq. Rolando Aparicio

Obrajes, La Paz, Bolivia

La edificación generará su propio microclima durante las 24 horas del día. Además, tendrá servicios monitoreados por sistemas informáticos.

Una piel de vidrio recubre al edificio Cobee-Sesa, estructura que se destaca entre las edificaciones de hormigón armado que se alzan en la zona de Obrajes. Esta construcción, pensada para alojar a empresas con uso intensivo de herramientas tecnológicas, contará con servicios controlados a través de computadoras, que la posicionarán entre las vanguardistas del país.


“El concepto es de una oficina-paisaje, donde se minimizaron los espacios cerrados, lo que posibilita un buen uso de la luz natural. Está pensado para dar mayor adaptabilidad a las empresas de uso intensivo de tecnologías”

Esto se logró con una estructura postensada que permite a los 10 pisos contar con espacios amplios y libres de columnas. Esta tecnología francesa se sostiene en macizas losas de 18 centímetros, que contrarrestan cualquier ruido de los pisos contiguos.

Paradójicamente, a pesar de estar rodeado de vidrios, éstos no podrán abrirse. Y es que el edificio generará su propio microclima a través de un sistema de aire acondicionado que se controlará automáticamente desde un centro de monitoreo computarizado. Éste permitirá a toda la edificación contar las 24 horas del día con una temperatura de 20 grados centígrados.

En la parte externa de cada piso se instalaron piezas de aluminio perforado que evitarán un excesivo calentamiento de los ambientes internos. “Se trata de barreras térmicas, efectivas para el ahorro de energía”.

“los detectores de incendio y el ingreso a todos los accesos al edificio serán monitoreados por computadoras. El ingreso a la estructura y a los ascensores, además, será a través de tarjetas. Y las luces de los pasillos no se controlarán con los clásicos interruptores, sino que serán programados previamente. En toda la estructura se hizo énfasis en los sistemas de conectividad y redes”, dijo el asesor de la obra, ingeniero Luis Soria.

Cada piso cuenta con espacios técnicos independientes, como el destinado a la instalación de redes internas de comunicación y otro dedicado a la seguridad.

El edificio, construido por la empresa CBI, inaugurado oficialmente el 16 de julio, en homenaje al Bicentenario del Grito Libertario paceño de 1809.

Santuario de La Torre, Hans Roth.

Santuario de la Torre – Arq. Hans Roth

Chochis, Bolivia

El nuevo santuario se ubica al pie de la formidable Torre de Chochis, en un paraje de gran belleza.

La construcción de piedra ciclópea vista intenta formar parte de la naturaleza circundante. La pequeña capilla central, mas bien una cueva, pretende ser un lugar retirado de meditación, formado alrededor del árbol de la vida, de la creación.

Tiene su única ventana con vista ala pendiente vertical de la torre de 300 metros de altura, llevando la mirada hacia el cielo. De este centro salen diversos corredores a manera de brazos, dividiendo el espacio natural en diferentes ambientes: un teatro con las dos columnas dedicadas a la danza de la vida y de la muerte, una capilla abierta con altar y púlpito para las grandes festividades, y formando parte de un recinto religioso en conjunto con la gruta  , la fuente de agua, la colina con la cruz, la vía pictórica sobre la vida de María, las veinte columnas talladas con motivos Chiquitanos, y los milagros de la salvación.

La arquitectura como espacio escultórico revela su significado y sentido simbólico, al visitante, que vaga de un lado al otro, meditando pieza por pieza. La fauna, la flora, y las costumbres del lugar cobraron vida en los tallos de las columnas, en un intento serio y creativo de la cultura artística popular.

Los ángeles tienen rostros Chiquitanos, y tocan los instrumentos musicales tradicionales.

Los talladores son jóvenes de la zona, formados en los talleres de San Miguel y Concepción, durante la restauración de los templos de Chiquitos, bajo la dirección de profesionales extranjeros radicados en Bolivia.

Proyecto: 1982-1992

Supervisión local: Ing. Richard Pfaffli

Artes plásticas: Catherine Perette, Klaus Astner, Manuel Macoño, José Angel Dorado, Cesar Lara, Saul Rodríguez, Ejti Stih.

Fotografía: Gustavo Olguin

Vista del nártex y murales interiores, detalle del atrio y portada principal, columna tallada que sostiene la cubierta, púlpito exterior sobre uno de los accesos laterales

Embajada de España, Arq. Gustavo Medeiros A.

mbajada de España – Arq. Gustavo Medeiros

Av. 6 de agosto, La Paz, Bolivia

Sobre la Av. Arce se encuentra la residencia del Embajador, obra en estilo Tudor del Arq. Hugo Lopez Videla, de 1945. Aparte de las obras de refacción de fachadas, se procedió al cambio total del sistema de calefacción e instalaciones eléctricas y sanitarias, con la incorporación de cinco cuartos de baño y la remodelación de todas las partes de la casa; intercomunicando por una estratégica escalera de caracol la planta noble con el sótano, que de este modo se recupero parcialmente como estar biblioteca del Embajador.

Se acomodaron separadamente varias dependencias de servicio. Asimismo se rehabilito el entretecho para las actividades sociales de los jóvenes. Debe destacarse que todas estas obras se hicieron sin desalojar a los habitantes y sin suspender las recepciones semanales que ofrecía el Embajador.

El nuevo edificio para la Cancillería se ubica sobre la Av. 6 de Agosto, paralela a la Arce. Consta de 3 plantas destinadas a la actividad cultural, consular y de chancillería, respectivamente, con una estructura periférica de hormigón armado y tijerales de madera que dejan los pisos totalmente libres para eventuales modificaciones interiores.

El volumen conjuga de la manera más evidente el soporte estructural con el manejo espacial, el que a su vez se percibe a través del tratamiento de la carpintería que confiere una calidad muy particular de luz y asoleamiento.

Las formas si bien parecen conjugarse con las casa Tudor, están inspiradas en las características de la casa paceña de principios de siglo (El Prado), con su simetría y crujía central que capta la luz cenital y enfarolados de arquitectura virreinal, debidamente transformados por una línea de diseño contemporáneo. El color de ambos edificios y el tratamiento del espacio del jardín, establece la relación de conjunto entre la residencia existente y la nueva Cancillería

Terreno: 2,262 m2

Area cancillería: 730m2

Area Residencia: 850m2

Colaboradores:

Arq. Isabel Di Caulo,Arq. Miguel Mercado, Ing. Reynaldo Ballivián, Ing. Galo Parada, Ing. Gonzalo Cabrera, Margaret de Guevara, Edgar Urioste

Ministerio Español:

Arq. José Luis Bañon, Arq. Alfonso Chico.

Constructores: Ing. Hernan Terceros, Ing. Rene Espinoza.